SUS PRIMEROS PASOS
Victor Gaviria, es uno de los directores mas revolucionarios por su trabajo con actores naturales, donde plasma las historias reales de estos personajes.
Caricatura víctor Gaviria. Ricky, ElColombiano.com. 2011
Nació en Medellín en 1955, y vivió en su juventud y en carne propia la transformación de la sociedad y las épocas aciagas de su ciudad natal. Estudió con jesuitas, y la educación que recibió le inculcó la importancia, moral, política y la preocupación social que hace parte de lo que él es como cineasta. Estudió psicología en la Universidad de Antioquia, y en ese entorno conoció poetas y decidió ser uno de ellos con éxito. Los recuerdos de las películas que rodaba su papá en bautizos, cumpleaños y comuniones se fueron sumando en su memoria hasta que el cine estalló en su cabeza, avivado por las cintas del neorrealismo italiano. Entonces decidió ser director y contar las historias que nadie más había contado en el país.
A Víctor le gusta hablar de manera coloquial, y se distancia de los diálogos teatrales y de los diálogos de cine. Como buen poeta, escritor, guionista y director, prefiere darles a sus escritos el tono poético que requiere el vacío de los actos cotidianos, para llevarlos ante el espejo de una realidad que solo a unos pocos es capaz de rozar. El momento perfecto, para él, no está curiosamente en un fotograma del cine. Sino en la amistad, en el instante en que comparte la vida con alguien, en el amor que siente por sus hijos y en la forma en que estos, sin guión ni libreto, le enseñan el placer de disfrutar la vida.
Ese pequeño universo neorrealista rodado con actores naturales se ha convertido, con el paso de los años, en un filme icónico del cine colombiano, y fue elegido como uno de los cincuenta filmes más importantes de la historia del cine iberoamericano.
Desde entonces Víctor Gaviria cree que los mejores actores son los naturales, porque son personas de la vida cotidiana que sin estar preparadas para convertirse en protagonistas, actúan para proteger y transitar por la vida misma y están enriquecidos por sus propias vivencias como personas, además de poseer la capacidad de narrar su propia vida y de vivirla con la visceralidad con que la afrontan a diario.
Por: Adriana Naranjo
Poesia de Víctor Gaviria: Dos Hermanos.